Arpista cantante y compositor ecuatoriano nació en la capital de su país: Quito. Su formación musical proviene de dos raíces: la popular, y la académica. La popular: asimilada dentro del contexto de la musicalidad innata de su gente, y del variado e infinito universo sonoro del país y del continente; lugares en donde un mundo sin sonidos, sin música, es prácticamente inconcebible.
Ramiro Uribe se inició musicalmente cantando en reuniones familiares y eventos escolares a la edad de 5 años. Posteriormente comenzaría el aprendizaje de la guitarra y el piano, a través de los ritmos ecuatorianos y latinoamericanos.
La segunda fuente de su formación profesional, la académica; procede de sus estudios en el Conservatorio Nacional de Música de Quito, en donde cursaría Contrabajo con el maestro René Bonilla además de paralelamente, estudiar en la Universidad Central del Ecuador: Ciencias del Lenguaje y Literatura.
Su encuentro con el arpa popular – que la ejecuta en forma autodidáctica – daría inicio a una nueva etapa en su actividad musical, pues el arpa dejó de ser con Ramiro, el instrumento destinado únicamente a la ejecución de los obligados temas instrumentales del repertorio usual, ya que al fusionar la aguda cadencia de su voz con el sonido cristalino del arpa obtuvo un producto estético exquisito: un sonido único, extremadamente dulce, suave, melancólico, cien por ciento ecuatoriano, pero universal; sonido que cala profundamente en el alma del auditorio.
En el escenario, el arpa deja constituirse en un ser separado de Ramiro para convertirse – igual que su voz – en una extensión de si mismo, y mucho más que eso: Ramiro, su voz y su arpa , se convierten en un solo ser que se comunica directamente con la audiencia, a través de la magia de su sensibilidad interpretativa.
Innovación, originalidad, son las características de su arte, estilo único que recrea un repertorio escogido con esmero, en donde predominan la cadencia melódica, la calidad literaria, y el mensaje del texto musicalizado ya sea, por medio de la pentafonía de géneros precolombinos de su país como el Yumbo, el Yaraví, el Danzante; con géneros afroecuatorianos como la Bomba; o bien con géneros mestizos como el Pasillo, la Tonada, el Albazo, el Aire Típico; así como también, a través de los ritmos latinoamericanos que más influenciado en él, provenientes de Colombia, Cuba, y Brasil, como: el Vallenato, la Cumbia, el Bolero, el Son, y la Bossa Nova.
Ramiro se ha presentado como solista, y como integrante de su grupo musical ecuatoriano “Nuevo Amanecer”, a más de en Ecuador: en Colombia, Bolivia, Perú, Alemania, España, Holanda, Francia, Gran Bretaña, Liechtenstein, Luxemburgo, Italia, y Suiza.
La música ecuatoriana actual es el grandioso resultado de la interacción principalmente de los tres grupos étnico-culturales más importantes del Ecuador: indios, mestizos y negros, sin dejar de tomar en cuenta las influencias de las músicas: inglesa-norteamericana, caribeña, y latinoamericana en general procedente fundamentalmente de Colombia, Bolivia, México, Perú, y Venezuela.
RAMIRO URIBE se presenta solo, o con un cuarteto, que incluye: violín o flauta traversa, guitarra, bajo, y percusión latina.
(Astrid von Meel)